El reglamento de esta carrera imponía competir con el Ascari de serie con la posibilidad de mejorarlo con material Ninco Pro Race.
El uso de un reglamento tan cerrado hace que la preparación de un coche sea más complicada de lo habitual, aunque la apariencia sea exactamente opuesta. Esto es así porque, al querer hacer un buen resultado, hay que pasar por un largo proceso de selección de material, especialmente básico en el chasis y en la carrocería. No puede colocarse en el carril el primer chasis que parece más plano o más ligero: hay que pasar a las pruebas de pista para valorar el comportamiento dinámico, y eso son horas de preparación que a estas alturas de temporada parecen aún más largas, y doblemente cuando, como en nuestro caso, presentamos dos equipos a la competición.